LENIN, EL FUNDADOR DEL COMUNISMO, ES AHORA MARCA
CAPITALISTA DE CIGARRILLOS Y VODKA.
Edgardo Malaspina
1
Los fundadores del comunismo lo decían una y mil
veces: lo único estable es la dialéctica: todo cambia, nada es eterno. Pero hay
algunos que siguen creyendo en el
comunismo, una ideología vencida. No obstante, según la misma dialéctica
marxista, las ideologías pasan de moda.
2
En la época soviética se hablaba de Lenin con el
respeto que se le tiene a las deidades, ahora las cosas dieron su giro
dialéctico.
¿Qué queda de Lenin en Rusia? Muy poco o tal vez
mucho. En los programas de Tv se le
insulta. Se le llama calvo sifilítico (no me lo contaron, lo vi). Recogí de un
basurero de Moscú un retrato de Lenin que probablemente adornaba una oficina en
tiempos del socialismo real. ¿Quién pasó al basurero de la Historia?
En el aeropuerto el oficial me pide que pase el
retrato por el aparato de rayos X. Le digo: es de Lenin, y él me contesta con
una sonrisa sarcástica: ya no creemos en ese viejito. Todos los políticos
amados y eternos fueron inmortales como los dioses del Olimpo. Toda una aporía.Nietzsche y el ocaso de los
ídolos.
3
En la URSS vendía un cigarrillo sin filtro, de poca
calidad, llamado “Prima”. Por su bajo
costo era el preferido de los estudiantes. Bueno, ese cigarrillo todavía se
vende pero con algunos cambios: la cajetilla es roja, tiene el rostro de Lenin
y se llama “Prima nostalgia”. Sin comentarios.
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La bebida espirituosa nacional en Rusia, como todos
sabemos, es el vodka (agüita). Se fabricaba con diferentes grados alcohólicos.
El gobierno zarista, a finales del siglo XIX, solicitó al único hombre de
aquella época que podía hacer un reglamento sobre la producción de vodka. Dimitri
Mendelev, el mismo de la Tabla Periódica, estableció en 1894 cómo y con cuántos grados debía destilarse el
vodka. Desde entonces aparecieron vodkas
de diferentes tipos y marcas, pero todos de 40 grados.
En los tiempos de Andropov se popularizó un vodka
barato con una etiqueta verde. La gente la llamaba “ andropovskaia”.
En los tiempos que corren, que son los de Putin,
aparecieron vodkas que recuerdan los nombres de políticos: “Putinka”, de Putin.
“Valodia y los osos” (Valodia y Medvedi : Valodia es el diminutivo de Vladimir (Putin),
mientras que Medvediev es el segundo hombre a bordo de Moscú y cuyo apellido
proviene de la palabra oso. “Vodka del
Zar” para recordar a Pedro El Grande. Pero la más exótica y hasta burlesca es
“Lenin en botella”, la cual se vende con una respectiva cantimplora con el
rostro del líder soviético. Él, que era abstemio, ahora es bebido por todos.
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Pedro el Grande construyó una ciudad y participó con
sus propias manos: Petrogrado o San Petersburgo. A la muerte de Lenin se le
llamó Leningrado. Gorki dijo que eso era correcto, pero acotó que ambos
personajes tenía la misma relevancia
histórica para Rusia.
Los expertos en cultura etílica afirman que el vodka
de Pedro El Grande es mejor que el de Lenin; entonces se entiende porque la ciudad de la Revolución Rusa se llama nuevamente San Petersburgo: ironías del
destino.
En lo que a mí respecta las probé todas, y dije que
me parecieron iguales. Un compañero de
trago me explicó: el vodka es uno solo. Lo vierten de un mismo barril pero en
diferentes botellas. Placebos para el alma, el galillo y el hígado.
6
El arte refleja la realidad. Las matrioskas son la
manifestación más conocida del arte popular ruso. En Arbat, el centro histórico
y artístico de Moscú, se venden unas matrioskas con los retratos de algunos
políticos. En orden descendiente por tamaño allí están: Putin, Yelsin, Gorbachov,
Stalin, y de último Lenin en miniatura, porque es así como lo ven las nuevas
generaciones. Todo pasa y todo queda, dice Antonio Machado en sus Cantares.
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En la actual Rusia capitalista se libra una batalla para
derribar las estatuas de Lenin. Sus
retratos fueron arrojados a la basura. Ya lo dije. En la Plaza Roja un señor
muy parecido a Lenin permite fotografías por unos cuantos rublos. A veces un
gendarme lo acosa y el Doble de Lenin debe correr como en la época del zar. Segundas
partes nunca fueron buenas, dijo Cervantes.
De tiempo en tiempo algunos rusos quieren sacar a
Lenin de la Plaza Roja, pero no pueden: ningún pueblo quiere aceptar su momia;
y Putin dice que eso deben decidirlo las generaciones futuras. Prudente decisión.
8
Sartre dijo que todas las corrientes filosóficas
necesariamente serán historia. El
marxismo (socialismo, comunismo) ya es historia; sólo que algunos no quieren
darse por enterados de la caída del Muro de Berlín y del derrumbe de la URSS.
9
El marxismo combatió la religión (la religión es el opio de los pueblos, Marx
dixit) con tal dureza que terminó
convirtiéndose en una de ellas. Pero el marxismo no fue una simple religión.
Fue una secta extrema con genocidio estalinista incluido. Ya lo dijo Jorge Luis
Borges: Hay
que tener cuidado al elegir a los enemigos porque uno termina pareciéndose a
ellos.
10
El comunismo fue un sueño que se convirtió en una
horrible pesadilla. “La teoría marxista era absolutamente falsa y pretenciosa.
El marxismo murió de marxismo”, dijo una vez Karl Popper, y agregó: no pasó la
prueba del principio de falsabilidad o falsacionismo.
11
Lenin, el adorado
líder comunista, es ahora una simple marca de mercancías capitalistas.
Hegel dijo que la historia se repite
como si dijéramos dos veces. Marx lo corrigió: la primera como tragedia, y la
segunda como farsa. El marxismo se combate con más marxismo. ¡Popper es un
genio!
12
¡ Sic transit gloria mundi!.
IMÁGENES
1. Retrato
de Lenin rescatado de un basurero moscovita.
2. Cigarrillos
“Prima nostalgia”.
3. Vodkas:
Lenin, Valodia y los osos, Putinka y Pedro El Grande.
4. Matrioskas
con líderes rusos.
5. Doble
de Lenin en la Plaza Roja.